Disciplina positiva
¿De qué manera podemos influir positivamente?
- El adulto debe superar la dificultad de trascender a la conducta y recordar el verdadero significado “solo quiero ser tenido en cuenta”, solo así se será eficaz con la ayuda al niño.
- “Ponerse en la piel del niño” Conecta ¿Qué quiere expresar cuando “se dispersa en lo que no le interesa”? Dificultad, llamada de atención… puede estar alejado de lo que se le intenta enseñar.
- Da pasos para obtener su colaboración, los niños colaboran más cuando pueden expresar su opinión y participar en su planificación y asigmación.
- Empatiza con sus sentimientos, esto no significa excusar malos comportamientos, es escucha atenta con el ánimo de comprender. ”Creo que entiendo como te sientes, entiendo que puedas pensar que quiero más tu hermana o a tu hermano pero no es así, te quiero mucho” Asegúrate de comprobar con él si has acertado.
- Invita al niño a centrarse en la solución, no ordenes, no sermonees, pregunta si tiene alguna idea para evitar el problema en el futuro, si no las tiene haz sugerencias hasta llegar a un acuerdo, deja de lado etiquetas y juicios previos “yo creo que es un poco “vaguete”. Focaliza la atención ¿Qué podríamos hacer para resolver esta tarea?
- Invierte tiempo en enseñar competencias al niño para que él acometa sus tareas con éxito, aún cuando se opine que ya debería saber hacerlo solo porque se le ha explicado mil veces.
- Da pasos pequeños que él pueda repetir “yo dibujo la mitad del círculo y tú la otra”
- Descubre qué sabe hacer y bríndale muchas oportunidades para que pueda demostrar su capacidad. “He de decir que he tenido que enseñarle hasta defenderse”Confía en él, los niños tienen muchos recursos pero no les damos la oportunidad de demostrarlos.
- Elimina toda expectativa de alcanzar la perfección.
- Céntrate en los aspectos positivos del niño.
- No abandones.
- Pasa regularmente ratos especiales con él. Haced listas de cosas que os apetecería hacer juntos.
- En clase, se puede buscar algún compañero para que le ayude en las tareas que le supongan dificultad.
- Busca actividades extraescolares o deportivas en las que se sienta capaz e ilusionado, esto le dará sensación de éxito y le motivará.
- Verbaliza el amor y el cariño que sientes por él.
- Una pregunta que le puede formular la profesora cuando pierde el interés y se muestra inquieto sería ¿Podría ser la razón de que no pares de dar vueltas por la clase porque crees que no puedes hacerlo bien y, por tanto, ni siquiera quieres intentarlo? Si el niño sonríe de forma involuntaria, como reflejo de reconocimiento, incluso mientras dice que no, es que hemos conectado con su necesidad. Si fuera así, se inicia la conversación asegurándole que comprende cómo se siente porque a todos nos pasa alguna vez, después, transmitir confianza en su capacidad ideando un plan para proceder tan despacio como él necesite “sé que no te crees capaz, pero yo se también que puedes hacerlo y estoy dispuesta a hacer todo lo necesario para conseguirlo”.
La mejor manera de cambiar un comportamiento inadecuado es hallar una forma positiva deayudar a ser tenido en cuenta e importante, aceptar este concepto intelectualmente es una cosa pero llevarlo a la práctica cuesta porque no tenemos ganas de ser positivos cuando un niño se porta como no queremos, porque somos reacios a aceptar nuestra parte de responsabilidad y porque cuando un chico se porta mal no está muy predispuesto a la influencia positiva, están demasiado alterados emocionalmente para aceptarla. Espera a que se serene y vuelve a intentarlo.
Y sobre todo
hacen falta dos para una lucha de poder, no bases nunca la relación en la confrontación, no se trata de ganar al niño sino de ganárselo”.
Sintiendo seguridad y confianza en su capacidad no solo se modificará la actitud, también el desarrollo motor se verá beneficiado. Pinchando en la imagen se accede a nuestro Pinterest, en Documentos informativos, actividades de motricidad gruesa y fina para un pequeño gran campeón.
Este ha sido un bosquejo de otra manera de atención a la infancia, bajo la mirada respetuosa, amable y firme de la Disciplina Positiva.
Agradecimiento a la mamá que generosamente comparte su experiencia.